Diálogo con el Che (1968) / Entrevista a Rolando Peña (2014)

-reseña y entrevista por Julio Ramos

 

El estreno reciente de la versión parcialmente restaurada de Diálogo con el Che (1968) de José Rodríguez Soltero en Ismo, Ismo, Ismo (Los Angeles Forum) ha sido un acontecimiento cinemático. La película incita a repensar la relación entre el cine experimental y las políticas revolucionarias de los años sesenta.   Filmada en el sótano de un apartamento en NY, apenas unos meses después de la tortura y de la muerte de Che Guevara en Bolivia hace 50 años (9-X-1967), el filme de Rodríguez Soltero tuvo un recorrido inicial en Cannes y el Berlinale bajo el título de Ché is Alive! antes de aterrizar en la Cinematheque de Jonas Mekas en Nueva York en 1969. Pero muy pronto cayó en el olvido.

Las dos películas anteriores del cineasta boricua del underground neoyorquino —Jerovi (1965) y Vida, Muerte y Asunsión de Lupe Vélez (1966)– corrieron una suerte distinta: recuperaron cierta visibilidad (y se restauraron en Anthology Films) gracias al revival del cine underground en los circuitos y discusiones LGBTQ hace aproximadamente una década.   Sin embargo, la aproximación experimental (y bilingüe) a las inscripciones revolucionarias de la masculinidad y de la iconicidad del comandante guerrillero permaneció desatendida por casi 50 años, oculta entre las grietas de conflictos entre poéticas e ideologías que parecían irreconciliables.

Cuando Mekas reseña la película en su Movie Journal del Village Voice (1-V-1969) destaca la extraordinaria performance de Taylor Mead como soldado norteamericano en Che is Alive!, aunque pasa por alto la puesta en escena del singular cruce intercultural y político en el filme. La colaboración de Rodríguez Soltero con el performero venezolano Rolando Peña en Diálogo con el Che estuvo motivada por la impugnación de la intervención norteamericana durante la captura y tortura brutal del Che en Bolivia, así como por la crítica de la apropiación de su imagen como un evento mediático; espectacularización que se comprueba, por ejemplo, en el Ché! (1969) de Fleischer, con la actuación de Omar Sharif, el primer drama biográfico hollywoodense sobre el ícono revolucionario.

Rodríguez Soltero y Peña radicalizan la estética experimental con un acento político en esta película transitada por las visiones y sonoridades múltiples de un underground divergente que ahora, casi 50 años después, propicia diálogos interseccionales entre el norte y el sur, y lleva a reconsiderar la participación latina en los movimientos contraculturales de los años 60.*

*nota: Este texto se publicó originalmente en inglés como parte de Ismo, Ismo, Ismo del L.A. Forum, festival que estrenó Diálogos con el Che el 24 de septiembre de 2017.

 


Hablamos con el performero y artista visual venezolano, Rolando Peña, quien recuerda su trabajo con el cineasta puertorriqueño José Rodríguez Soltero en la realización del Diálogo con el Che (1968), película experimental filmada en Nueva York unos pocos meses después de la muerte del Che Guevara en Bolivia. Filmados por Julio Ramos una tarde de mayo del 2014 en el apartamento de Peña en Caracas, los vídeos breves que aquí compartimos ofrecen una aproximación al contexto de la participación latina y latinoamericana en el underground neoyorquino y los movimientos contraculturales de fines de los 1960s.

 

 

 

One Comment

Add yours →

  1. Excelente Entrevista-Testimonio, realizada por Julio Ramos, y este servidor……Bravo Julio….y gracias.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: